visitas al blog

Mostrando entradas con la etiqueta REFLEXIONES. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta REFLEXIONES. Mostrar todas las entradas

jueves, 10 de enero de 2019

un escrito mañanero

A veces las cosas no salen como queremos, o no son como la imaginamos.
 Si dejáramos de tener una mente cuadrada donde todo debe encajar como en un rompecabezas, si tuviésemos una perspectiva más amplia y entendiéramos que las expectativas pueden varíar por muchos motivos que no tienen nada que ver con nosotros, tal vez no nos sorprenderíamos si los planes o proyectos no siguen el curso esperado.

Somos también muy reactivos y enseguida nos enfadamos, nos quejamos de nuestra mala suerte y hasta pensamos que alguien nos debe haber echado un mal de ojo para que las cosas no nos salgan.

No somos nada flexibles, ni adaptables, y no vemos más allá de nuestras narices porque si lo hiciéramos nos daríamos cuenta que muchas de las cosas negativas que nos pasan son bendiciones disfrazadas. Es decir, que el no conseguir lo que uno quiere en el momento, puede traernos algo mejor más adelante que no tendríamos si hubiésemos obtenido lo primero.

Y eso nos ha pasado a todos en algún momento de nuestra vida, pero no lo recordamos cuando estamos en pleno proceso, en el mismo centro de la tormenta. Nos ponemos nerviosos, nos paraliza el miedo, Dios mío, Dios mío... por qué me has abandonado?  Siempre echando la culpa a los demás, cuando somos nosotros los que manejamos la barca, los que en el fondo no confiamos en nuestras habilidades para salir del paso. No aprendemos de una para otra, y no nos creemos que El está ahí precisamente para eso, para no dejar que nuestro barco se hunda del todo.
Es curioso como podemos acusarlo con plena convicción, - Señor, me has abandonado- y como para creer que el nos sostendrá, vacilamos y dudamos de su existencia. ¿Será El o es una casualidad del destino?
Pues sí, así somos los humanos.

Y esto que me ha salido sin pensar, sin planear, porque cuando escribo, sé como empiezo, pero nunca como termino.  Será que me dejo llevar... por la inspiración de mis tormentas.
Buen día pescaítos.

Anyma-

martes, 8 de enero de 2019

Reflexión


La imagen de hoy

La imagen de hoy, martes 8 de enero de 2019




La imagen de hoy es muy significativa teniendo en cuenta la fecha en la que estamos, comenzando un año lleno de propósitos, expectativas y sueños por cumplir. 

Esta panorámica  puede representar muy bien esas metas que nos proponemos a primero de año, cuando estamos en una orilla del río y necesitamos cruzar, atravesar los obstáculos que encontremos en nuestro camino, pisar cada piedra, llegar a la otra orilla, sin mojarte, o mojándote un poco también, el caso es completar el cruce, creer en nuestra capacidad para lograrlo, para llegar hacia donde queramos o necesitemos. 
Para ello, se necesita paciencia, equilibrio, confianza, serenidad y valentía. Apoyar el pie en cada piedra, sin resbalar... un pie detrás de otro, una piedra tras otra...

 Puede que te impresione tanto el agua que te demores en cruzar, puede que tengas miedo de resbalar, que no sepas nadar, que no tengas equilibrio suficiente, que no te veas con posibilidades para cruzar; también te demorarás en tus planes, en tus metas, en tus logros si no crees en tí mismo, si no te arriesgas, si no estás dispuesto a mojarte o a llevarte algún que otro golpe, pero te aseguro que vale la pena intentarlo.

Hoy, día 8 de enero, tenemos un río por delante para cruzar. No hay prisas, tenemos tiempo para reflexionar, para fortalecernos, para saber donde tenemos que pisar, para mantener el equilibrio mirando sólo al frente; para ver cada piedra, no como un obstáculo sino como una enseñanza. Pisar y dejar atrás, así se hace el camino, así se llega a la orilla, así se completa el cruce y así, se logran las metas.

Ojalá este año, seáis capaces de atravesar todos vuestros ríos.

Anyma


Seguimos....

Queridos pescaítos, entre un año y otro, apenas pasan segundos bañados en champán y uvas. Pero en algunos casos, esos segundos son horas y días dónde se pierde la noción del tiempo y... Amanece con otro número en el calendario. Porque, siempre amanece.  Demos gracias por eso, y empecemos el día, cualquier día, como hoy, con esperanza y con todo lo aprendido en las noches oscuras.
Muy buenos días, seguimos ...

lunes, 7 de enero de 2019

Reflexión

El miedo al fracaso…

tumblr_l7edhl3q1h1qz8d8go1_500 BP.jpg“Los animales no pueden fracasar porque no hay reglas para valorar el comportamiento natural. Las arañas tejen redes, no redes bien hechas o mal hechas. Los gatos persiguen a los ratones: si les falla uno, simplemente se van detrás de otro. No se quedan echados quejándose porque uno se les escapó; ni tienen un colapso nervioso porque fracasaron. ¡El comportamiento natural simplemente es! ¿Por qué no aplicas la misma lógica a tu propio comportamiento y te libras del miedo al fracaso?”
Wayne W. Dyer,
Tus Zonas Erróneas
Unadosisdiaria.com

martes, 25 de diciembre de 2018

REFLEXIÓN

El rincón del pensamiento

12 de diciembre de 2018
Cuentos cortos con grandes lecciones de vida. Para reflexionar :)
La oveja impacienteIlustración: Alberto Vázquez

La oveja impaciente


Un pastor tenía dos ovejas que habían parido corderitos. Por las noches, los encerraba a todos en un corral para que no se los comieran los lobos y, durante el día, soltaba a las ovejas y dejaba a los corderitos en casa. En una ocasión, un temporal de lluvias sorprendió a las ovejas y desbordó un río que les impedía volver a casa para amamantar a sus crías. Una de las ovejas se puso a pastar paciente en la orilla, esperando que bajaran las aguas.

La otra se impacientó pensando que no volvería a tiempo para dar de comer a los corderos y éstos se morirían de hambre, además de que podían ser devoradas por los lobos. «Tranquila, las aguas bajarán y mañana podremos volver a casa sanas y salvas», le dijo su compañera. De nada sirvió, ya que la oveja se arrojó igualmente al agua. El pastor, que había intentado ayudarlas, vio, impotente desde la otra orilla, cómo el cuerpo de la oveja era arrastrado por la corriente, que lo empotraba contra las rocas. Pasadas unas horas, el nivel del río descendió y la otra oveja pudo volver a casa. A partir de entonces, se hizo cargo de sus hijos y de los huérfanos.

Esto nos hace ver que sin esperanza es imposible tener paciencia, pero también que la impaciencia por alcanzar las cosas rápido nos hace perder la oportunidad de conseguirlas en el futuro.

martes, 18 de diciembre de 2018

ladrones de energía

Son 10. Diez ladrones de energía que, según el Dalai Lama, nos atrapan y nos dejan vacíos. No nos damos cuenta, pero vivimos tan pendientes de lo banal que no atendemos a lo realmente importante.
Tomar distancia y alejarse de lo innecesario nos ayuda a mejorar la salud a todos los niveles. La dificultad está en hacerse consciente de qué es lo dañino, cuáles son esos ladrones de energía, para caminar al lugar que nos ofrece cierta estabilidad. Por ello, el conocido líder espiritual, ha hecho una interesante recopilación de 10 ladrones que nos chupan a todos la energía.
Veamos más sobre estos ladrones de energía:
Mujer con mariposas alrededor y cuerdas sobre el brazo

1 – Personas que están abonadas al modo queja.

“Deja ir a personas que sólo llegan para compartir quejas, problemas, historias desastrosas, miedo y juicio de los demás. Si alguien busca un bote para echar su basura, procura que no sea en tu mente”.
Las personas enchufadas a un protestador automático nos agotan y nos restan. Son ladrones de energía. Poner un ápice de energía en aliviar los egocentrismos ajenos destroza nuestra esencia. Así que, como se suele decir, si alguien busca un bote para echar su basura, procura que no sea en tu mente. Desliga tu vida de todo aquello que te aleje de ti y no dejes que los demás te arrastren hacia sus tormentas.

2 – Las cuentas…claras

“Paga tus cuentas a tiempo. Al mismo tiempo cobra a quién te debe o elige dejarlo ir, si ya es imposible cobrarle”. Tener las cuentas claras significa tener la certeza de que no le debemos nada a nadie y que nadie nos debe nada a nosotros.
Las deudas abrasan nuestra tranquilidad. Por ello es esencial que no tengamos cuentas pendientes por ahí, así no tendremos que escondernos o avergonzarnos por no aliviar un compromiso que nosotros hemos contraído. Quien conoce la sensación de ahogo, comprende que adeudar es uno de los mayores ladrones de energía que existen.

3 – Las promesas pendientes

“Si no has cumplido, pregúntate por qué tienes resistencia. Siempre tienes derecho a cambiar de opinión, a disculparte, a compensar, a re-negociar y a ofrecer otra alternativa hacia una promesa no cumplida; aunque no como costumbre. La forma más fácil de evitar el no cumplir con algo que no quieres hacer, es decir NO desde el principio”.
Ser personas de palabra es una de las cualidades más valoradas y cotizadas en el mercado de las relaciones interpersonales. Esto, sin duda, es una característica que va más allá porque refleja buenas intenciones y consideración hacia los demás.

mujer palomas

4 – No escuchar nuestros intereses

“Elimina en lo posible y delega aquellas tareas que no prefieres hacer y dedica tu tiempo a hacer las que sí disfrutas”. No delegar aquello que nos resulta aversivo y que es posible delegar supone llenar nuestra vida de una negatividad innecesaria.
A veces, simplemente, no estamos en condiciones de realizar una tarea. Puede que, incluso, otra persona vaya a hacerla mejor o le apetezca más. Esto vale tanto para el hogar como para el trabajo. Seguro que hay cientos de opciones que garantizan una mejor condición. Esto garantizará un equilibrio positivo en nuestras vidas.

5 – No descansar ni actuar

“Date permiso para descansar si estás en un momento que lo necesitas y date permiso para actuar si estás en un momento de oportunidad”.Cada cual lleva su ritmo pero es importante saber descansar y coger fuerzas. No hacerlo cuanto más lo necesitamos implica perder nuestras fuerzas y cometer irresponsabilidades que acabarán en arrepentimiento.

6 – El desorden

“Tira, levanta y organiza, nada te toma más energía que un espacio desordenado y lleno de cosas del pasado que ya no necesitas”. Hay desórdenes y desórdenes. Algunos más catastróficos que otros pero, al fin y al cabo, todos necesitamos de la iniciativa de deshacernos de algo.
Mujer con una máscara

7- No cuidar tu salud

“Da prioridad a tu salud, sin la maquinaria de tu cuerpo trabajando al máximo, no puedes hacer mucho. Tómate algunos descansos”. Sirve de poco tener mucho trabajo, mucho dinero y mucho patrimonio si no somos capaces de cuidar lo que nos sostiene: nuestro cuerpo.  Es esencial que dediquemos tiempo a relajarnos, hacer deporte, alimentarnos bien y conocernos.

8 – Las situaciones difíciles

“Enfrenta las situaciones tóxicas que estás tolerando, desde rescatar a un amigo o a un familiar, hasta tolerar acciones negativas de una pareja o un grupo; toma la acción necesaria”. Las situaciones difíciles nos ayudan a crear estrategias si tomamos las riendas e intentamos resolverlo. Posponer o ignorar cosas puede generarnos estrés y dificultar así nuestra estabilidad.

9 – No aceptar

“Acepta. No es resignación, pero nada te hace perder más energía que el resistir y pelear contra una situación que no puedes cambiar”. El único medio para deshacernos de los monstruos es aceptarlos. Asumir que hay cosas que no deben cambiarse es un paso más para la consecución del bienestar emocional.
Mujer en el mar enfrentándose a sus ladrones de energía

10 – No perdonar

“Perdona, deja ir una situación que te esté causando dolor, siempre puedes elegir dejar el dolor del recuerdo”. El perdón sirve de cómoda almohada. Es probable que la vida nos ponga a prueba, por ello es importante que no alimentemos rencores; porque, si lo hacemos, moriremos poco a poco.
Guardar rencor es humano, muy humano. Pero también lo es perdonar. Y errar. Dicen que quien no ama, no perdona. De hecho, precisamente es el amor el culpable del perdón. El amor al otro, a la vida, al mundo y a uno mismo.
lamenteesmaravillosa.com

lunes, 17 de diciembre de 2018

un amor dormido


Un amor dormido es como un ave encerrada en una jaula. Existe, vive ahí, somos capaces de sentir su canto, sus latidos, pero no termina de extender sus alas de volar con libertad. Es una situación que muchas parejas que se aman pueden experimentar. Hay afecto profundo, ambos lo saben, pero este no termina de hacerse presente y llenar de magia sus vidas.
Esa sensación puede ser confusa. Por momentos puedes llegar a sentir que ya no quieres a esa persona, aunque le guardes cariño. Pero si te ves en riesgo de perderla, inmediatamente detectas que lo que hay es un amor dormido. Aún así, dudas. ¿Valdrá la pena seguir en unarelación que no me hace vibrar? ¿Será de veras amor o solo costumbre?
Mantén el amor en tu corazón. Una vida sin él es como un jardín sin sol cuando las flores están muertas”.
-Oscar Wilde-
Después de algunos años de relación casi todas las parejas se formulan esas preguntas. También se las plantearon un grupo de investigadores de la Universidad Estatal de Florida (Estados Unidos). A partir de ello elaboraron un estudio para indagar si introduciendo un cambio específico en las relaciones estas volvían a reverdecer. Descubrieron que sí.

Del enamoramiento al amor dormido

Sabemos que siempre las primeras etapas de una relación son las más excitantes. En esa fase inicial, que se llama enamoramiento, el mundo parece otro. Sí: se sienten mariposas en el estómago. Pero más allá de esto, parece como si todo tuviera sentido y además no un sentido cualquiera, un sentido pleno y verdadero. Como si se hubiera encontrado una pieza que completa un rompecabezas. Y como si este, a su vez, revelara una figura exultante y maravillosa.

arboles con aspecto humano mirándose

Cuando estamos enamorados probamos a qué sabe la eternidad. Es tan extraordinaria esa sensación que nunca nos resignamos a dejar de sentirla. Sin embargo, por más que lo deseemos, esa magia de los comienzos poco a poco empieza a disiparse. Las mariposas vuelan más pausado y descubrimos que lo infinito, pese a todo, también tiene límites. Si el amor fuera un plato de comida, podríamos decir que hemos roto la estética con la que nos lo han presentado, en parte por lo que lo elegimos, y empezamos a comérnoslo.
En ese punto hay, literalmente, una desilusión: no es raro que encontremos algún matiz que no nos termine de gustar. Se va saliendo paulatinamente de la ilusión para volver a la realidad, que siempre es un poco más decepcionante. Si hay un vínculo valioso con la pareja, logra sortearse el momento para pasar a otra etapa más pausada, menos excitante, pero también más profunda.
Sin embargo, al pasar del tiempo también aparece cierta nostalgia de lo que se ha perdido, de cómo nos sentíamos entonces. Esta nostalgia es la que precisamente nos interroga sobre si el amor se ha quedado, trasformándose, o se ha marchado.
No se rechaza a la pareja, pero tampoco se siente aquel entusiasmo de los primeros encuentros. No hay un deseo de terminar el vínculo, pero sí flota una sensación de desgana hacia este. Además, nos damos cuenta de que lo que antes no nos costaba hacer por el otro y que incluso hacíamos con verdadero placer y alegría ahora se ha convertido en una cuesta arriba con cierta pendiente.
Ese fue el momento que exploraron los investigadores de la Universidad de La Florida y para el que lograron encontrar una clave que reactivara a la pareja. Si os parece, vamos con él.

Así despierta un amor dormido

Los investigadores detectaron que cuando hay un amor dormido, cada uno asocia automáticamente a su pareja con una serie de imágenes e ideas. Estas aparecen en la mente sin que la persona sea consciente de ello. Así, por ejemplo, una mujer ve a su hombre e inmediatamente en su mente se dibujan unas pantuflas. O un hombre mira a su mujer y emerge la idea de una pila de frascos. 


Los científicos se preguntaron qué pasaría si se entrenara a los miembros de la pareja para que cambiaran esas asociaciones automáticas. El experimento, teniendo en cuenta esta hipótesis, se centró en lograr que cada persona asociara a su pareja con nuevas imágenes, todas ellas positivas. Que ella, en lugar de ver unas pantuflas viera, por ejemplo, un perrito. Y él no viera una pila de frascos, sino un lindo animal.
Los psicólogos utilizaron el método de condicionamiento operante. Este consistió dar un refuerzo cada vez que la persona asociara la imagen de su pareja con una imagen positiva. Y ningún estímulo o un estímulo negativo si no lo hacía. Para el experimento se tomó un grupo de 144 parejas voluntarias. Para extraer conclusiones más objetivas, a algunos se les presentaron imágenes positivas y a otros neutras.
El experimento demostró que los investigadores tenían razón en sus hipótesis sobre “el amor dormido”. Efectivamente, quienes recibieron el condicionamiento de asociaciones positivas con sus parejas sintieron que la relación se había revitalizado. Los que recibieron el condicionamiento con imágenes neutras (Ej: un tenedor) no mostraron mayores transformaciones. Quedó comprobado, entonces, que el amor también es un asunto que se ajusta y se desajusta en el marco cerebral y que es muy sensible a las asociaciones.
De esta manera, se comprobó que rescatando y potenciando la imagen de la pareja mediante la creación de conexiones de esta imagen con estímulos positivos el amor resucitaba. Quizás es por esto que, en las parejas en las que existe una admiración mutua, difícilmente el amor comienza a roncar y necesita que lo despierten.

pareja con piel de piedra besándose

lamenteesmaravillosa.com

sábado, 15 de diciembre de 2018

Una especie de almacén...

Schermo Cinema Roma BP.JPG“El cuerpo es una especie de almacén en el que guardamos todas nuestras experiencias. Ya no necesitamos que los ángeles tomen nota de lo que nos va pasando en la vida, porque sabemos que existe un proceso neurológico que se cuida de hacerlo por nosotros. Por eso, no es infrecuente que las personas que han estado cerca de la muerte afirmen que han vuelto a ver toda su vida como en una película”.
Thomas Keating,
La condición humana

Unadosisdiaria.com

jueves, 13 de diciembre de 2018

Reflexión

La mariposa azulIlustración: Alberto Vázquez

La mariposa azul

Había una vez un viudo que vivía con sus dos hijas curiosas e inteligentes. Las niñas siempre hacían muchas preguntas, algunas las sabía responder, otras no. Quería darles la mejor educación, así que las mandó de vacaciones con un sabio que vivía en lo alto de una colina. Éste siempre contestaba a todas las preguntas sin ni siquiera dudar, por eso, las niñas decidieron inventar una que no pudiera responder. Una de ellas cogió una mariposa azul y le explicó a la otra que pondría al animal en sus manos y le preguntaría al sabio si estaba viva o muerta.


«Si dice que está muerta, abriré mis manos y la dejaré volar, pero si dice que está viva, la aplastaré. Así, sea cuál sea la respuesta, será equivocada».
Las dos niñas fueron a ver al sabio , que estaba meditando, y le hicieron la pregunta. «Tengo aquí una mariposa azul. Dígame, ¿está viva o muerta?». Muy calmadamente, éste respondió: «Eso depende de ti... Ella está en tus manos». 


Así es nuestra vida, nuestro presente y nuestro futuro. No debemos culpar a nadie cuando algo falle, somos nosotros los responsables de nuestros logros y fracasos. Nuestra vida está en nuestras manos, como la mariposa azul... Nos toca a no­sotros escoger qué hacer con ella.

Fuente: Revista Pronto

domingo, 9 de diciembre de 2018

RELACIÓN DE PAREJA

Pistas que indican que una relación de pareja está rota

A la hora de hablar de relaciones de pareja en crisis es casi obligatorio hacer referencia a John Gottman. Investigador, psicólogo y médico, pasó cuatro décadas de su vida estudiando las relaciones de pareja para predecir las rupturas. Así, y partiendo de estos trabajos, centros como la Universidad de Washington y su departamento de psicología, es capaz de predecir por ejemplo en el 80% de los casos si una pareja o un matrimonio avanzará o se separará.
Tal y como nos explican en un artículo son muchos los factores que debemos tener en cuenta. Veamos algunos de ellos.

Crítica destructiva

Es normal que cuando hay confianza y se quiere mucho a una persona, haya críticas por ambas partes. De hecho, esto es una forma sana de conocerse mejor y mejorar ciertos aspectos de la pareja que desconocíamos. Sin embargo, hay un tipo de crítica que es mucho más dolorosa y que se usa para hacer daño a la otra parte. Es lo que se llama crítica destructiva.

personas en el sofá representando cuando la pareja está rota

Todo el mundo comete errores, pero cuando nuestra pareja acude a este típico de crítica para atacarnos o herir nuestros sentimientos, puede denotar que esta ya no siente lo mismo. Un ejemplo claro de esto puede ser decir: “Has llegado tan tarde que ya no te preocupas lo mismo por mí”. Esto es un golpe bajo en toda regla.
¿Qué se puede hacer ante esto? Pues proponle un plan inmediato donde la otra parte se vea involucrada. De esta manera retomaréis el contacto, podréis hacer cosas juntos y hablar de vuestros problemas.

Desprecio

Cuando existe el desprecio tanto por una como por ambas partes, y de manera usual, se puede decir que la pareja no llegará a buen puerto. El desprecio se puede manifestar en forma de sarcasmo, insulto, o mímica. En cualquiera de sus formas provocará que la otra persona no se sienta apenas valorada.
¿Qué se puede hacer ante esto y si percibo que mi relación de pareja está rota?  Pues no queda otra que construir el respeto mutuo desde el principio de la relación y hacer énfasis en las cosas buenas que nos gusta de la pareja. Como por ejemplo: “Qué bien te sienta el pelo largo” o “Me encanta cuando me haces reír” De esta manera conseguiréis unos lazos afectivos mucho más fuertes.
Así, tal y como nos revela un estudio de la Universidad de Chicago, ser capaces de cuidar de nuestra actitud, de ser positivos y cercanos, no solo mejora la relación de pareja: también mejora nuestra salud.Invirtamos por tanto en ello.
Una relación de pareja está rota cuando falla la amistad, cuando se vulnera la confianza y se apagan las risas y la espontaneidad

pareja está rota

Una pareja está rota cuando viven siempre a la defensiva

Comúnmente, cuando una persona hace algo mal, tiende a justificarse con hechos ajenos a los suyos, o poniéndose a la defensiva. Esto es normal como ya os hemos dicho. Sin embargo, si se recurre demasiado a este método, también puede denotar que nuestra pareja ya no nos quiere tanto. Esto suele ocurrir mucho para tapar infidelidades, consiguiendo así que infiel no se sienta tan culpable por su “desliz”
¿Qué se puede hacer ante esto? Cuando surja un problema y nuestra pareja esté a la defensiva, lo mejor será intentar poner una solución entre ambos y dejar atrás reproches y orgullos antes de desembocar en una relación rota.

El muro de piedra y la relación de pareja

Esto es uno de los últimos factores que aparecen cuando ya la pareja está en las últimas. El muro de piedra se manifiesta también de múltiples formas. No hay apenas comunicación, se cae en la rutina, no se comparten los mismos hobbies…
Este aparece después de un largo periodo de crisis, malos rollos o cuando ha habido un hecho irreconciliable entre ambos. Tras esto, en muchas ocasiones lo siguiente es ya una relación rota.
“Lo contrario del amor no es el odio, sino la indiferencia.”
-Elie Wiesel-

¿Qué se puede hacer ante esto y si mi relación de pareja está rota? Si de verdad te importa la otra persona, actúa. Habla lo primera con ella y dialogad sobre cómo podéis retomar la relación. Sé compresivo y escucha lo que no le gusta de ti y viceversa. Intentad llegar a un acuerdo que si lo conseguís, vuestra relación quedará mucho más reforzada.

viernes, 7 de diciembre de 2018

Hoy tengo ganas de escribir


Ahora que está próximo a finalizar el año, me pongo a reflexionar sobre estos trescientos y pico de días que llevamos a nuestra espalda y puedo decir que no me pesan como otros años.
He aprendido muchas cosas estos doce meses, enseñanza que se suma a la de los años anteriores,  aunque parezca que seguimos suspendiendo asignaturas pero es que es difícil asimilar ciertas cosas, entender a las personas, saber ocupar tu lugar y por supuesto antes de ocuparlo, encontrarlo. Parece muy fácil porque además, hoy con la tecnología te encuentras un sinfín de textos, frases y capítulos de autoayuda a los que les puedes dar un pantallazo y revisar de vez en cuando, según las necesidades del momento.
Parece que es fácil porque además hemos recorrido el camino muchas veces, cruzándonos con las mismas personas y tropezando con la misma piedra, en el mismo sitio. Somos duros de mollera porque nos cuesta rodear el hoyo, o tomar por otro sendero.
Nos cuesta también perdonar y perdonarnos, queremos llevar siempre la razón, porque tenemos una visión particular del asunto y no nos bajamos del burro. No aceptamos las perspectivas, nos dan miedo los cambios, preferimos morirnos de frío a mudarnos a otro piso más soleado. Lo de mudarnos es una metáfora que viene muy bien a la hora de explicar nuestro interior. Es como si nos costara mucho trabajo mover los muebles de sitio, y aunque estemos viviendo mal, nos aguantamos, nos conformamos con lo que tenemos porque es más cómodo o más seguro, o porque así nos lo contaron y eso lo llevamos grabado en la cabeza. Es el caso del niño amaestrado. Muchos sólo pueden ser rebeldes en el corazón.
En fin, muchas cosas se me pasan por la cabeza, hoy 7 de diciembre, en medio de un puente que para unos será maravilloso y para otros,  dos losas que están a punto de aplastarlos.
He aprendido, claro que sí, igual que vosotros. Cada uno en su medida, aprende, de sus errores más que nada, que es lo que de verdad duele aunque soy consciente de que volveré a caer en algún que otro agujero negro, de esos que nos están predestinado porque no soy ni mucho menos perfecta, pero sí estoy empezando a cambiar los muebles de sitio en mi interior, estoy redecorando mi casa espiritual, tirando la basurilla que sobra y dejando espacio para que cuando entre este año nuevo, pueda abrirle la puerta de par en par, sin que se tropiece con ningún trasto viejo.

Anyma


LA ANCIANA SABIA (cuentos milenarios)