IDEAS PARA PASAR LAS NAVIDADES FUERA

Si no te entusiasma cocinar de más o simplemente estás cansada de que tus Navidades sean siempre iguales, ¿Por qué no haces las maletas y huyes de la rutina? Aquí tienes algunas ideas para disfrutar de la Navidad fuera de casa.

DEJA QUE OTRA PERSONA LIDIE CON EL ESTRÉS

¿Por qué preparar tú la comida de Navidad cuando otros lo pueden hacer por ti? Ahórrate el dinero que gastarías normalmente en la cena/comida navideña e inviértelo en una estancia en un hotel rural de lujo para un par de noches. La mayoría de los hoteles ofrecen paquetes navideños para familias, con banquete, habitaciones decoradas y extras especiales (desde regalos en la almohada hasta visitas de Papá Noel para los niños). No tendréis que cocinar, limpiar, fregar o entretener a los invitados. ¡Te preguntarás por qué no lo hiciste antes!

HAZLE UNA VISITA A PAPÁ NOEL

No hay nada más navideño que la nieve, pero si quieres una Blanca Navidad Garantizada, vete al norte. Regálales a tus nietos una experiencia inolvidable visitando a Papá Noel en Laponia (Finlandia). O alquila una cabaña acogedora en Noruega o Suecia, donde te despertarás el día de Navidad rodeada de nieve (puedes estar segura).

PASA LAS NAVIDADES EN LA PLAYA

Puede que lo tradicional sea pasar las Navidades junto a la chimenea, pero… ¿quién ha dicho que haya que seguir la tradición? No hay ningún motivo que te impida subirte a un avión y tomarte el turrón en la playa. El Caribe, Tailandia, Vietnam, Costa Rica, México, Dubái y Omán, Malasia, Florida… tienen temperaturas muy cálidas en invierno. Y si prefieres quedarte más cerca de casa, las Islas Canarias tienen precios razonables y temperaturas de 20 grados en Navidad.

CAMBIA DE CASA CON ALGUIEN

Si tu presupuesto es reducido, ¿por qué no te planteas cambiar la casa con algún amigo que viva en otra zona del país? Requerirá un poco de preparación (como darle a la tuya una buena limpieza antes de irte y escribir instrucciones para tus invitados sobre cómo funciona la televisión, por ejemplo), pero vivir unos días la vida de otro es emocionante, además de gratis. Si eliges personas con una familia parecida a la tuya, podrás disfrutar de un cambio de escenario con todas las comodidades de tu casa.