Sentirse bien no sólo es una cuestión física, sino también emocional. Para
muchas personas mayores, esta etapa de la vida ofrece muchas experiencias
positivas como tener más tiempo libre para seguir aprendiendo y para
actividades de ocio. Pero en ocasiones hay circunstancias que pueden influir de
forma negativa en su bienestar emocional como la pérdida de la pareja o de
personas cercanas, la falta de organización del tiempo diario, un progresivo
aislamiento social, problemas de salud física...
Recuerde las siguientes sugerencias para sentirse mejor:
- Continúe relacionándose con las personas de su entorno: familia,
amistades, vecinos.
- Intente llevar una vida activa, busque una actividad física que se adapte a
su nivel de movilidad, condición física y estado de salud.
- Manténgase consciente de las cosas que ocurren a su alrededor, no hay nada
mejor que aprovechar al máximo cada día.
- Continúe aprendiendo: aficiones antiguas o cosas nuevas le harán sentirse con
más seguridad y le ayudarán a disfrutar.
- Aproveche las oportunidades de su entorno para hacer cosas, como por ejemplo,
participar en actividades de voluntariado, que le harán sentirse útil y en
conexión con su comunidad.
Información facilitada por el Servicio de
Envejecimiento Saludable de la Consejería de Salud.
No hay comentarios:
Publicar un comentario